Contemplar un pelícano blanco es uno de los mayores deseos de los amantes de las aves que se animan a ir de safari por Kenia. Esta majestuosa especie llama poderosamente la atención debido a su tamaño y a la extravagante forma de su pico. ¡Vamos a conocerlos un poco mejor!
A pesar de su nombre, el pelícano blanco no tiene un plumaje de color uniforme puesto que presenta manchas naranjadas a la altura del pecho. Por otro lado, sus alas tienen una distintiva franja negra y puede verse un matiz rosado rodeando los ajos hasta el pico.
Y por supuesto, el pico del pelícano es uno de sus rasgos más distintivos. Estamos ante un pico largo con una especie de bolsa ideal para capturar muchos peces de un solo bocado.
Los pelícanos son aves grandes y necesitan espacio para moverse y volar. Un ejemplar adulto puede medir dos metros y pesar alrededor de quince kilos. Pero que no te engañen sus dimensiones ya que estas aves se manejan de maravilla en las corrientes de aire.
Los mejores lugares para encontrar pelícanos en Kenia son el Lago Nakuru y el Lago Manyara. Algo que no es de extrañar debido a que estas aves prefieren los ambientes húmedos en los que poder estar a sus anchas. Se trata de una especie que a la que le encanta estar en grupo pero no es cuestión de que los pelícanos sean muy sociables.
En estado salvaje una bandada proporciona cierta protección contra los depredadores, entre los que se incluye el peligroso cocodrilo. Por norma general, algunos pelícano se encargan de vigilar los alrededores y de avisar a los otros de posibles amenazas emitiendo sonidos característicos que actúan como señal para levantar el vuelo.
Los pelícanos comen peces fundamentalmente así que es normal que los lagos sean su hábitat predilecto. Y, como no podía ser de otra manera, las zonas de cría suelen encontrarse cerca de fuentes de agua.
¿Sabías que los pelícanos se turnan para incubar los huevos? Sin embargo, todo tiene un precio. Si un pelícano vuelve al nido sin comida no se le permitirá descansar y tendrá que seguir buscando sustento. Las crías podrán valerse por sí mismas a los tres meses pero hasta entonces sus padres serán los responsables de procurarles alimento.
En resumen, el pelícano blanco es una maravilla de la naturaleza que no deja de sorprendernos. Con su apariencia peculiar y su comportamiento social constituyen un auténtico espectáculo que vale la pena contemplar si viajas a Kenia.