cueva de kitum
La Cueva de Kitum presenta arañazos de colmillos de elefante.

¿Has oído hablar alguna vez de la cueva de Kitum? Durante siglos ha sido conocida por sus depósitos de sal y por las excavaciones llevadas a cabo por los antiguos egipcios en busca de oro. Sin embargo, la leyenda de esta gruta se ha vuelto más siniestra en nuestros días por ser un lugar en el que el Ébola campa a sus anchas.
La cueva de Kitum se encuentra situada en el monte Elgon. Se trata de un volcán extinto que surgió como resultado del enfriamiento de la tierra. El Parque Nacional del Monte Elgon extiende su territorio entre Uganda y Kenia siendo esta última parte mucho más pequeña, de sólo unos 169 km².
¿Sabías que la sección keniana del parque nacional del Monte Elgon fue declarada reserva de la Biosfera? Este hecho justifica por sí solo la visita a este parque prácticamente desconocido por no mencionar su relativa cercanía al lago Victoria que está a unos 140 kilómetros al noreste de la zona.
Pero lamentablemente, también hay un lado oscuro que trasciende la belleza de los tesoros naturales de la zona. La cueva de Kitum, antaño efugio y lugar de peregrinaje para los animales que iban en busca de sus depósitos de sal, se ha convertido en la actualidad en un sitio a evitar.
Durante mucho tiempo los elefantes entraban en esta cueva ya arañaban las paredes con sus colmillos intentando triturar bloques de sal para alimentarse. Las marcas de este proceso aún son perceptibles en las paredes e incluso se han descubierto lugares peligrosos en los que perdieron la vida los elefantes desprevenidos que no prestaban atención a sus pisadas.
No fue hasta 1980 cuando se detectó que ciertas personas que habían visitado la cueva de Kitum habían contraído un el virus de Marburg. Por si no lo sabes, este virus es mortal y tiene cierto parecido con el Ébola. Se piensa que los murciélagos de la cueva pueden ser los principales causantes de la propagación de la enfermedad.
Como ves, la cueva de Kitum tiene una historia interesante aunque algo siniestra. Como en tantos otros entornos naturales de Kenia existe una fuerte presencia de fauna salvaje pero si se detecta un posible riesgo de contraer una enfermedad grave es aconsejable no acercarse a la zona.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Ir arriba