El Parque Nacional de Meru es uno de esos destinos de safari que siempre están llenos de sorpresas. Seguir la pista de los Cinco Grandes o explorar un santuario de rinocerontes son sólo algunas de las aventuras en las que podrás embarcarte en este lugar privilegiado.
Llegar hasta el Parque Nacional de Meru desde Nairobi es bastante sencillo. Aunque debes recordar que el tráfico en Kenia tiene un ritmo muy particular y no sigue las reglas a las que estamos acostumbrados en países europeos. Conducir en África es todo un reto y lo mejor es que dejes que se ponga al volante un guía experto para evitar accidentes y sustos innecesarios.
Tienes dos opciones para llegar a Meru por carretera. La primera de ellas es la ruta de Nyeri-Nanyuki-Meru y la segunda alternativa es ir por Embu. Sea cuál sea el camino que escojas podrás disfrutar de vistas panorámicas.
Una vez allí, te espera un clima predominantemente cálido y árido. Las temperaturas durante el día suelen rondar los 29 °C mientras que por la noche refresca hasta unos agradables 19 °C. No olvides tener esto en cuenta cuando prepares tu maleta.
¿Y qué vas a ver en Meru? Este parque es un buen sitio para buscar a los Cinco Grandes y a muchos otros animales. Puedes tener la oportunidad de cruzarte con manadas de elefantes, leones, leopardos y guepardos. Ojo, los depredadores son algo más esquivos debido a que intentan moverse con sigilo para no espantar a sus presas.
Es importante que no te obsesiones con ver determinados animales cuando vas de safari. Nunca se sabe con qué animales te encontrarás durante tu itinerario y si quieres tener una buena experiencia debes saborear cada momento. En África la naturaleza tiene sus propios planes y éstos no tienen por qué coincidir con los tuyos.
Sin embargo, sí que hay una especie animal que cobra un mayor protagonismo en Meru. Hablamos nada más y nada menos que del rinoceronte. Desde el año 2000 se impulsó una revitalización del Parque Meru y uno de los tesoros que datan de aquella época es un impresionante santuario de rinocerontes de unos 85 kilómetros cuadrados de extensión.
Por otro lado, los ríos Tana y Rojewero que atraviesan el parque te permitirán ver una abundante variedad de vida acuática como, por ejemplo, hipopótamos y cocodrilos del Nilo. El paisaje se completa con las impresionantes vistas del Monte Kenia.
En suma, el Parque Nacional de Meru es un ejemplo de la lucha por la conservación de la vida silvestre y eso se nota en la riqueza de sus paisajes y en la variedad de su fauna. ¿Te animas a conocer a fondo este regalo de la naturaleza?
