¿Te has preguntado alguna vez qué cosas conoces sobre los bosquimanos? Un pueblo de lo más interesante cuyos orígenes se remontan al menos a 20.000 años de antigüedad. Y lo más sorprendente es que sus costumbres ancestrales han resistido el paso del tiempo. Y lo mejor de todo es que puedes verlos en Tanzania.
¿Sabes de dónde viene la palabra bosquimano? Es una variación del término bosjeman que utilizaron los colonos holandeses para denominar a los individuos de la etnia San. Su significado salta a la vista ya que no es otra cosa que una forma abreviada de decir “hombre de los bosques”.
Tradicionalmente, los bosquimanos habitaban las zonas australes del continente africano. Para que nos entendamos, su territorio se extendería por lo que hoy en día sería Namibia, Zimbabue, Botswana y Sudáfrica.
Existe la creencia de que los bosquimanos llegaron a Tanzania hace al menos unos 10.00 años. Su número en estos momentos es bastante reducido ya que se estima que quedan aproximadamente 3.000 personas de este pueblo en todo el país.
Si vienes de safari quizá los veas en los alrededores del algo Eyasi. Parece ser que antes se los podía ver en el Área de Conservación de Ngorongoro pero han acabado abandonando esta zona. Quizá la afluencia turística ha tenido algo que ver en la elección de este cambio de aires.
Ver un asentamiento bosquimano es como viajar en el tiempo hasta el Paleolítico. Sin embargo, esto no significa que sean gentes bárbaras e incapaces de transmitir conocimientos. Fabrican sus propias herramientas y se desenvuelven en el entorno salvaje como nadie.
Además, han desarrollado un lenguaje bastante complejo aunque no en el sentido en el que nos podemos imaginar desde una óptica más moderna. Las denominadas lenguas joisanas no usan palabras. Para comunicar cualquier mensaje hay que conocer la secuencia de chasquidos apropiada. Como habrás adivinado, no tienen escritura.
En cuanto al modo de vida de los bosquimanos tanto en Tanzania como en otras partes de África cabe señalar que es principalmente nómada. Las mujeres recolectan frutas y los hombres abaten animales sirviéndose de arcos y flechas envenenadas. La puntería de estos cazadores expertos es legendaria. Entre sus presas más comunes están las liebres, los búfalos o incluso los babuinos.
En el capítulo de la espiritualidad y la religión los chamanes ocupan un lugar preeminente. Es común que en los poblados se celebren bailes con fines curativos en los que participa toda la tribu incluido el chamán.
El objetivo de estas danzas es honrar y aplacar a los antepasados pues se dice que ellos son los responsables de las enfermedades. Los espíritus de los ancestros intentan de este modo que los vivos les hagan compañía en la otra vida.
Los bosquimanos y sus costumbres despiertan una atracción irresistible. No obstante, todas estas tradiciones están en riesgo de perderse para siempre porque sólo un tercio de las gentes de la etnia san continúan viviendo de esta manera. ¡Date prisa y ven a conocerlos a Tanzania!
